Descenso desde el Cruceiro da Armada hasta Camiños Chans: Sobre todo para los ciclistas es un punto a tener en cuenta, el desnivel es importante y las numerosas piedras sueltas pueden provocar más de un accidente. Prestad atención a los cruces para acceder a Amarela, Sardiñeiro y la Cala del Talón.
Sin madrugar mucho nos preparamos par la etapa de hoy, tomamos cafe en la entrada del pueblo con la pareja que durmio en el albergue y luego cada uno por su lado, quedamos ha tomar una cerbeza en la entrada de Cee y comeremos en la playa para no llegar demasiado pronto, el albergue queda en la salida de Corcubion mas o menos un km. San Roque es uno de los sitios mas especiales del Camino, es un albergue de donativo y te preparan la cena y el desayuno comunitario, lo llevan hospitaleros voluntarios. Desde la habitacion de arriba hay una cama lateral desde la cual por la noche se puede divisar el Faro de Finisterre llegando su luz hasta la cama, es una de las mejores vistas del Camino.
Saliendo de Olveiroa nos encontramos con Hospital (bar) antes del desvio hacia Finisterre o Muxia, recomiendo no parar en ese bar de Hospital, chorizos y ladrones, sobre todo con los Peregrinos de fuera de España. Una vez le comente a la señora del bar de lo caro que era el bar y me comento que el Peregrino esta de paso y no repite, yo le comente que con esos precios normal que no repitan, me cobro menos por ser nacional, eso no es asi, el Peregrino no es tonto y si que repite Caminos, que me lo digan a mi, ademas de que nos pasamos informacion, por eseto hago el blog, informacion. Llegados al desvio tenemos dos opciones, Finisterre o Muxia, da igual, es lo mismo en km. pero no en vistas. Si es la primera vez que haceis este Camino yo recomiendo por Fisterra, hay mas playa, a mi personalmente me da lo mismo por un sitio que por otro, pero la vajada hasta Cee es de impresion, sobre todo para los ciclistas, con cuidado pero es para disfrutarla, las vistas desde el Cruceiro son impresionantes, desde ese punto ya se divisa toda la costa incluido el faro de Finisterre.
Tambien comentar que es importante que desde Hospital hasta Cee no hay nada mas, es necesario ir con agua suficiente ya que hay zonas sin sombra y en verano sobre todo hace mucho calor.
Al llegar al albergue de San Roque ya me esta esperando Edu, ya tenia yo ganas de verle y darle un abrazo. Por la noche cena comunitaria con todos los compañeros de viaje y un par de botellas de orujo para calentar los animos Peregrinos y contarnos batallitas de nuestros Caminos. El Americano tiene mañana vuelo de regreso pero despues de hablarle tanto de este albergue ha decidido hacer lo siguiente; ha llegado hasta Finisterre y ha sellado, ha pillado un taxi y ha regresado hasta el albergue para cenar y pasar la noche con nosotros, mañana en bus ha Santiago para su regreso, ha sido todo un detallo por su parte, no se arrepentira de lo hecho.
En Cee Se puede visitar el
Museo Fernando Blanco, en la plaza de la Constitución, que alberga desde instrumental científico y material didáctico hasta colecciones de animales, minerales y fósiles. También esconde muestras de arte, pintura y orfebrería religiosa. Además de la iglesia parroquial, merecen las modernistas
Casa Mayán y
Guillén; la
casa rectoral y el noble
pazo de Cotón, situado en la calle Magdalena, de principios del XVII y residencia de familias como los Carantoña. Un excelente lugar de descanso es la
playa de la Concha y el conocido Relleno, el terreno ganado al océano a finales de los setenta. Cee es
industria: la factoría Ferroatlántica -de ferroaleaciones-, que se pasa al tomar la bifurcación hacia Fisterra, da empleo a cientos de personas; es también
agricultura: el sustento y forma de vida en muchas de sus aldeas; y es
servicios: hasta tres albergues privados se abrieron entre 2010 y 2011 y cuenta con centros comerciales, tiendas, mercado dominical, bancos, farmacias y hospital. Corcubión, vocablo formado por dos voces que puede traducirse como fondo de lago, es un municipio modesto pero entrañable - el de menor superficie de A Coruña - compuesto por dos parroquias: el propio San Marcos de Corcubión y San Pedro de Redonda, y habitado por unos 1.800 habitantes. Fue declarado
Conjunto Histórico - Artístico en 1984. Este recodo del Atlántico fue habitado por celtas que dejaron sus huellas en el castro defensivo del
monte Quenxe, un mirador privilegiado que controla toda la ría. A partir del siglo XIII los habitantes se fueron desplazando desde la ladera de la montaña - esta especie de península tiene un gran desnivel que el peregrino cata en la subida a la aldea de Vilar - hacia el mar. La parroquial de
San Marcos, declarada
Bien de Interés Cultural, se construye tras esa época y gran parte de su estilo puede considerarse gótico marinero, aunque la fachada es neogótica y alguna capilla barroca.
Luciano Huidobro resalta la relación de Corcubión con Venecia: "caso curioso y digno de notarse, la advocación a San Marcos: La Señorísima Señoría de Venecia se halló durante la Edad Media íntimamente ligada por los vínculos de su activismo y astuto comercio con este puerto galaico. Aquí arribaban las naves venecianas en busca de metales y los ricos productos del país". En la calle Antonio Porrúa se puede ver la
capilla del Pilar, de 1931 y ahora destinada a diversas actividades culturales. En la parroquia de Redonda, a desmano del caminante, se encuentra la
iglesia románica de San Pedro, del siglo XIII con varias tallas de San Pedro, San Juan Bautista y las Vírgenes del Rosario y de las Mercedes. Una visita más detenida a la localidad permite descubrir los pazos de los
Condes de Traba y el de
Altamira y también edificios modernistas y burgueses como
Casa Miñones. En
punta Pión se alza el
castillo del Cardenal que, junto al castillo del Príncipe de Cee, se construyeron en el siglo XVIII para sellar la ría de las posibles incursiones extranjeras defendiéndola de los ataques.
Mañana con un poco de resaca llegaremos a Finisterre, tengo ganas de saludar a Bego, hospitalera del albergue.